¿qué pasa si la albúmina está baja?

¿qué pasa si la albúmina está baja?

¿qué pasa si la albúmina está baja?

Bajo nivel de proteínas y albúmina

¿Qué es un análisis de albúmina en sangre? Un análisis de albúmina en sangre mide la cantidad de albúmina en la sangre. La albúmina es una proteína producida por el hígado. La albúmina ayuda a mantener el líquido en el torrente sanguíneo para que no se filtre a otros tejidos. También transporta diversas sustancias por todo el cuerpo, como hormonas, vitaminas y enzimas. Los niveles bajos de albúmina pueden indicar un problema en el hígado o en los riñones: ALB

El análisis de albúmina en sangre es un tipo de prueba de la función hepática. Las pruebas de la función hepática son análisis de sangre que miden diferentes enzimas y proteínas del hígado, incluida la albúmina. Un análisis de albúmina también puede formar parte de un panel metabólico completo, una prueba que mide varias sustancias en la sangre. Estas sustancias incluyen electrolitos, glucosa y proteínas como la albúmina.

¿Por qué necesito un análisis de albúmina en sangre? Es posible que su médico le haya ordenado pruebas de la función hepática o un panel metabólico completo, que incluye pruebas de albúmina, como parte de su chequeo habitual. También puede necesitar esta prueba si tiene síntomas de enfermedad hepática o renal.Los síntomas de la enfermedad hepática incluyen:Los síntomas de la enfermedad renal incluyen:

Síntomas de baja albúmina

La albúmina sérica es la principal proteína que se encuentra en nuestra sangre. Se fabrica en nuestro hígado, pero necesitamos una dieta muy buena con suficientes proteínas para fabricar la cantidad adecuada. El nivel normal de albúmina en la sangre es de 3,5 g/dL a 5 g/dL.

La albúmina sérica tiene muchas funciones importantes. Actúa como un imán en la sangre para mantener el líquido en el lugar correcto en todo el cuerpo. Cuando es demasiado baja, puede producirse una hinchazón por la acumulación de líquido en los pies, los tobillos, las manos, alrededor de los ojos, la parte baja de la espalda u otras partes del cuerpo.

Tratamiento de la albúmina baja

La hipoalbuminemia (o hipoalbuminemia) es un signo médico en el que el nivel de albúmina en la sangre es bajo[1]. Esto puede deberse a una disminución de la producción en el hígado, a un aumento de las pérdidas en el tracto gastrointestinal o en los riñones, a una mayor utilización en el organismo o a una distribución anormal entre los compartimentos corporales. Los pacientes suelen presentar hipoalbuminemia como consecuencia de otro proceso patológico, como la sepsis, la cirrosis en el hígado, el síndrome nefrótico en los riñones o la enteropatía con pérdida de proteínas en el tracto gastrointestinal. Una de las funciones de la albúmina es ser el principal impulsor de la presión oncótica (concentración de proteínas en la sangre) en el torrente sanguíneo y en el organismo. Por lo tanto, la hipoalbuminemia conduce a una distribución anormal de los fluidos dentro del cuerpo y sus compartimentos. Como resultado, los síntomas asociados incluyen edema en la parte inferior de las piernas, ascitis en el abdomen y derrames alrededor de los órganos internos. Las pruebas de laboratorio destinadas a evaluar la función hepática diagnostican la hipoalbuminemia. Una vez identificada, es un indicador de mal pronóstico para pacientes con diversas enfermedades. Sin embargo, sólo se trata en indicaciones muy específicas en pacientes con cirrosis y síndrome nefrótico. En cambio, el tratamiento se centra en la causa subyacente de la hipoalbuminemia. La albúmina es un respondedor de fase negativa aguda y no es un indicador fiable del estado nutricional.

Causas del bajo nivel de albúmina

La albúmina es la proteína más abundante en la sangre.    Necesitamos proteínas para curar heridas o incisiones, para fabricar células sanguíneas que transporten oxígeno o combatan infecciones y para mantener prácticamente todas las células del cuerpo.    Las enfermedades críticas aumentan nuestra necesidad de proteínas.

La albúmina es uno de los primeros tipos de proteínas que disminuyen durante la enfermedad. La medimos porque puede ayudarnos a evaluar el estado nutricional de un paciente.    También la medimos porque puede indicarnos la gravedad de la enfermedad de un paciente.

Cuando un paciente está muy enfermo, el nivel de albúmina suele ser muy bajo.  Esto puede deberse a que está utilizando sus proteínas a un ritmo muy elevado o a que algunas proteínas se están «filtrando» en los tejidos inflamados.    También puede deberse a que los órganos no funcionen tan bien como es normal (por ejemplo, mala circulación o disminución de la función del hígado, los riñones o el intestino).

Durante una enfermedad muy grave, los niveles de albúmina pueden ser muy bajos aunque alimentemos a los pacientes con las calorías necesarias. Cuando los pacientes empiezan a mejorar, a menudo vemos que sus niveles de albúmina empiezan a mejorar. Una albúmina baja no es necesariamente algo que tratemos. Por el contrario, suele ser uno de los muchos signos (llamados «marcadores») que pueden ayudarnos a identificar que un paciente está muy enfermo.    Cuando un paciente empieza a mejorar, podemos ver que la albúmina empieza a subir de nuevo.

Acerca del autor

Josue Llorente

Soy Josue Llorente, tengo 25 años y soy licenciado en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid con experiencia en medios tradicionales y digitales. Me apasiona el periodismo en esta nueva era y su evolución en el medio digital.

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